lunes, 10 de noviembre de 2014

Del venerar y tal. DP 57


Yo veneraré a mi termo, dos puntos

La ajenitud y la falta de fe nos acabarán matando, más si dudo en la tilde de la fe, por eso me encomiendo al todo poderoso termo de 100 litros que acompañará mi vida desde hoy, cada uno se agarra a lo que puede para pedir y tal, puede que inventemos imágenes o credos, que recemos por rezar, elijo a un termo eléctrico con todas sus consecuencias, ya comprobé que lo del palo ardiendo no siempre funciona.

Veneraré lo que quiera, hoy que sé que en mi país todo es puro surrealismo mágico trágico, que no entendemos de política por mucho que queramos, no somos políticos, ni médicos, por muchos virus virales que nos metan por televisión, y como tantas chorradas que leo y veo, decido que de las mentiras también se vive, por eso creo mi religión nueva, basada en la más absurda absurdez, le llevaré flores a mi calentador eléctrico luchando por ser antisistema, ya no soy cofrade de gas natural, no los necesito, no seré atea ni agnóstica, construiré un templo en mi lavadero, porque quiero y porque puedo, los dos metros cuadrados no me lo permiten, pero ahí obraré un milagro, y de esta tontería pasaré a otro tipo de veneración, la de los hombres artistas tormentosos, como Damian Rice, mi nuevo dios, él si sabe, yo si sé, ahora si sé.

Mi calentador eléctrico es tan grande, blanco, vertical y puro que es el mismo Cautivo, el cristo de Málaga, no hay duda. Creyentes y no creyentes no miento, es él.

Mientras quito la mierda de la obra que ha hecho realidad que en breve vuelva a tener agua caliente, pienso en mi extrema estupidez, la hallada estos días de limpiar sin control, y del vivir en modo gore, eso no puedo explicarlo sin que venga asuntos sociales a quitarme a mi amada prole. Mientras escribo con 9 dedos el mundo sigue girando, y oigo a mi Rice, y noto como se deja el alma en cada estrofa, y yo con él. Mientras haya tonterías a mí alrededor me seguiré agarrando a mi termo de 100 litros, ahora que tiene cuatro puntos de subjección que ni el dios de los cristianos podría arrancar, son como clavos, y también hubo resurrecciones, y mujeres que lloraron, también hubo demonios, necesarios siempre, para que discierna el bien, sin mal no lo hay.

Ahora que Cataluña ha dicho que quiere ser independiente por el placer de comunicarse y sentirse libre le diré al señor Mas que venga a rogar a mi termo que se obre su milagro de ser país, que aquí todas sus idioteces serán aceptadas, que me traiga una limosna, unas flores y una vela, que la encienda, que no se rinda, que llegará el día en que todos los milagros se concedan. No seáis descreídos, yo ya no lo soy.

Atrás quedaron los días de sentirme perdida, de buscar mi camino. He visto la luz, y aprendí también que la mayoría de las fantasías se evaporan, como el mismo agua calentada, porque me lo dijo Rice, él si sabe, repito.
Sé que se necesita mucho para conocer a un hombre, o a una mujer, sé que no se puede idolatrar a una mujer con cara de globo, alguien romperá ese sueño, ahora creo y sé.
Y como esto no tiene ningún sentido ni lo tendrá por mucho que se intente leer, ahora que entiendo que tendré pocas visitas, que sois hombres y mujeres de poca fe, rezaré por vosotros a mi termo mientras a mi Damian Rice oigo una y otra vez.



Lucía Morales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mi CV está aquí. Dp 124

Estaba tomando cañas, dos puntos No recuerdo la última vez que escribí un Dp, seguramente hace demasiado, demasiado de todo, para ca...